Ser mamá de tres trabajando en casa, ha significado que tengo que administrar mejor mi tiempo y ser mucho más organizada para poder dar seguimiento a mis proyectos. Sinceramente el desorden me vuelve loca y soy una persona orientada al cumplimiento de objetivos (personales, familiares y del hogar), me gusta enfocarme en “sacar” resultados y esa sensación que te da volverte un poquito más productiva.
Al igual que muchas de ustedes, en ocasiones soy un circo de tres pistas; tengo varias cosas que debo hacer o atender y necesito priorizar, completar todos los pendientes asignados a un día y ponerme otros tantos para continuar al día siguiente, por ello el uso de notas se ha convertido en una herramienta simple para sacar mi lado más productivo.
Las notas me ayudan a priorizar, simplificar, a recordar, a categorizar mis pendientes, a lograr pensar con mayor claridad y hasta a motivarme…¿pero cómo las uso?
- Para hacer mis amadas listas que me ayudan a administrarme, ordenando las tareas prioritarias del día.
- Para crear mapas mentales y hacer lluvia de ideas antes de desarrollar un proyecto o una estrategia que debo de seguir.
- Para que fluya la inspiración y la creatividad a través de frases y afirmaciones.
- Para anotar recordatorios y convertir pensamientos en tareas y acciones concretas
Recuerda que las notas al igual que la agenda, por más bonitas, coloridas que se encuentren, si no son atendidas serán solo un “adorno” sin utilidad, un total desperdicio. Imagina llegar al final del día y ver cómo tu lista de tareas pendientes, mañana será un poco más larga por no dar seguimiento a lo que tenías que hacer el día de hoy… de pensarse, ¿no?
Cuéntame ¿Tu utilizas notas como herramienta de organización y productividad?
Soy Teté Moctezuma 
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